Adiós Pelé: se va un rey pero vivirá una leyenda

 

El mundo del fútbol está de luto y no es para menos, luego del fallecimiento de uno de los futbolistas más maravillosos y extraordinarios que haya nacido en la tierra, el hombre que a base de espectaculares goles, regates y potencia de ganó su lugar inolvidable en el balompié, aún cuando la generación actual no lo haya visto jugar y que su tiempo fue a blanco y negro y sin tanta prensa ni redes sociales. Con la muerte física de Edson Arantes do Nascimento, mejor conocido como “Pelé” se ha ido un rey, pero vivirá por siempre una leyenda.

 

Nacido en Três Corações, Minas Gerais, Brasil, el 23 de octubre de 1940 (82 años), el que fuera el ‘9’ de la selección Brasileña tricampeona del mundo entre 1958 y 1970 se cansó de hacer goles y dejar un legado grande, que aún cinco décadas después seguía vigente y seguirá siendo tema de discusión cuando se habla del mejor jugador de la historia, con comparaciones que divide el universo entre los simpatizantes de Lionel Messi, Diego Armando Maradona y Cristiano Ronaldo, los más reconocidos genios que se atreven con sus irreverencias y talentos a “sentarse en la mesa” con Pelé.

 

Autor de 1284 goles según su propio registro entre clubes y la “Canarinha”, con la que marcó 95 tantos, incluyendo 12 en los mundiales, Pelé hizo su carrera prácticamente completa en el Santos FC, al que hizo un club histórico y reconocido en el mundo, luego de ganar seis veces la Serie A de Brasil, además de dos Copa Libertadores (1962 y 1963), dos Copas Intercontinentales (hoy Mundial de Clubes) y una Supercopa de campeones Intercontinentales, amén de 10 veces el torneo estatal (Campeonato Paulista), anotando 1087 goles con esa institución.

 

El brasileño no necesitó de salir de Sudamérica para ser reconocido, su depredador olfato goleador lo hizo temeroso para los rivales a los que enfrentaba, haciendo casi toda su vida en su amado Santos. Solo un paso por Estados Unidos con el legendario Cosmos de Nueva York, ya en el declive de su carrera, hizo que su vida futbolística tuviera algo de brillo fuera del “Peixe”.

 

A muchos les gusta hacer podium o top 5, 10 de los mejores jugadores de la historia. Los más longevos seguidores del balompié son los que tiene el privilegio de decir “vi jugar a Pelé, a Maradona y a Messi/Cristiano en tres generaciones distintas y pueden tener quizás un concepto más “imparcial” sobre quién es el mejor. Lo que si es cierto es que cada uno marcó su época y en la década del 50 al 70 no hay discusión sobre quién fue el verdadero rey del fútbol. Y lo que tampoco queda duda es que dentro de 50 años más, cuando pasen los Messi/Cristiano, los Mbappé/Haland y salgan nuevas generaciones, el nombre de Pelé seguirá latente y continuará entrando en esa eterna y hasta ridicula discusión sobre cual jugador merece la etiqueta de “Goat” o “Cabra” en español, que significa en sus siglas Greatest Of All Times o en español, el más grande (jugador) de todos los tiempos.

 

El mundo del deporte en general llora su partida, porque no son solo los del fútbol los que le reconocen su gran figura y su aporte en la globalización del balompié. Hoy se va un jugador extraordinario al que como diría en vida en una de sus canciones el gran “Chente”, Vicente Fernández, desde donde esté, Pelé seguirá siendo el rey.