¿Futbolistas al Poder?
Cada vez que se reclama la presencia y la participación del futbolista venezolano retirado, o de esos dirigentes apóstoles que le han puesto el lomo y el pecho, formando generaciones sin recibir nada a cambio, siento que hay que detenerse a sopesar las causas por las que no se han encumbrado en la pirámide del fútbol venezolano, llegando a la Federación.
A nivel mundial, el fútbol siempre ha tenido -y sigue teniendo al frente-, empresarios, bien en los equipos o en las asociaciones nacionales, y hasta los entes rectores como FIFA, UEFA, CONMEBOL, CONCACAF o en la Confederación Africana.
La diferencia ha estribado, en que la estructura deportiva, incluso en lo administrativo, tiene injerencia directa de exfutbolistas que, una vez retirados, asumieron su alta preparación para ocupar cargos en esas organizaciones. Y hasta se dio el caso de Platini al frente de la UEFA, lamentablemente implicado en situaciones irregulares durante su mandato.
Ahí están los casos más visibles en Europa con Beckenbauer (Bayern), Leonardo (PSG), Zanetti y Córdoba (Inter), en su momento Hierro o Valdano (Federación y Real Madrid); y en Argentina, el caso más evidente es el del uruguayo Francescoli (River Plate).
Muchos exfutbolistas venezolanos se han convertido en buenos cuadros gerenciales de sus propias empresas. Sin embargo, nunca vieron el fútbol como un escenario en el que podían alcanzar un día su nominación. Dejaron espacio para que apareciera gente que, sin ese background, se hiciera a cargos directivos, y que, más allá de sus errores y aciertos, fueron llevando a trocha y mocha lo que ahora tenemos como fútbol venezolano.
Cuando los políticos venezolanos se dieron cuenta de que el fútbol era una vitrina para sus manejos, comenzaron a tomar los espacios de la dirigencia. Llegaron todos esos personajes, que ahora criticamos, porque los exfutbolistas mismos les dieron la posibilidad. No sólo porque no aparecieron en las pequeñas estructuras futbolísticas de las comunidades, si acaso con alguna academia, sino porque se desentendieron del tema dirigencial.
Entonces, ahora, no pueden aparecer reclamando espacios porque la mayoría están impedidos de penetrar en ese fútbol aficionado que es el que ha gobernado los destinos de la Federación Venezolana de Fútbol.
Pero de que existe una capacidad, comprobable, real, instalada de buenos profesionales en esos futbolistas retirados y entrenadores que han atesorado una excelente formación en muchos aspectos que pueden contribuir a la organicidad y a un manejo acertado del #FUTVE, de eso no me queda duda.
El día que realmente quieran llegar a la Federación, es porque han labrado un camino, aportando su experiencia, su conocimiento de causa, para intentar corregir las situaciones que ellos padecieron y que hoy sufre, en mayor o menor medida, nuestra golpeada #Vinotinto. No apareciendo con sus cacareadas y extemporáneas quejas cada vez que hay elecciones.
Manos a la obra.
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