Luis Guerra: ícono de la nueva estirpe minerista

 

1areadepeligro 110pxLos nuevos tiempos en Mineros de Guayana apuntan al relanzamiento del jugador con acento local. Una región que ha sido un emporio de grandes futbolistas como Stalin Rivas, Cheo Gómez, Enrique Samuel, Roberto Freites, Ramón Parra, William González, Noel Sanvicente, Luis Filosa, Juan García, “Cari Cari” Noriega y Alexis “Pelecito” García, entre otras figuras de gran relevancia a nivel nacional, fue perdiendo en los últimos años el protagonismo del elemento guayanés.

 

El tema de la cantera volvió a convertirse en prioridad con la asunción del Luis “Pájaro” Vera como estratega del elenco negriazul. En poco tiempo, quien fuera igualmente uno de los mejores mediocampistas salidos del estado Bolívar, ha dejado evidencias de su apego a esta filosofía, respaldada íntegramente por la directiva actual.

”El jugador de Guayana es el mejor dotado técnicamente de Venezuela y vamos a brindarle todas la oportunidades para que despliegue su talento e imaginación”, reveló Vera al asumir el mando técnico.

Luis Guerra ha sido una de las cartas de esta retadora propuesta y con él, fichas como el juvenil Ángel Lezama, quien acaba de ser convocado a la Selección Nacional Sub-20, y “Columbita” Moreno, vástago de aquel escurridizo delantero oriental, Wilfredo “Columba” Moreno. Todos salidos de las fuerzas básicas del club que se repotenciarán con la próxima inauguración de su bien dotada sede deportiva, en la que acopiarán todo el potencial del fútbol de estos lares, para hacerlo crecer y desarrollarse bajo los mejores parámetros.

Luis Guerra llegó al fútbol profesional con el apodo de “Balotelli”, un mote que poca gracia le causa a un muchacho de extracción humilde, con buenos modales y disciplina, que nada tiene que ver con el estrafalario moreno italiano, que arrastra fama de díscolo. El es simplemente Guerra o “Guerrita”, una especie de enganche de buen despliegue físico, capaz de desequilibrar con sus fintas a las más férreas defensas. El continente conoció de sus habilidades en la última Copa Libertadores de América.

“Un producto de exportación, que debe ser llevado sin prisa para que madure como persona y jugador”, considera la dirigencia negriazul. Y es que desde hace rato no aparecía un elemento del patio con tanto carisma, al igual que Lezama, par de prospectos que van a seguir reafirmando la aquilatada condición del jugador guayanés dentro y fuera de Venezuela.