Los inicios de Cristián Cásseres Jr y su transición del ataque a la defensa

 

Luis Vílchez / @lvilchez8.- La gran apuesta de José Peseiro en el inicio del Premundial rumbo a Catar 2022 ha sido la inclusión de Cristian Cásseres Jr en la línea de volantes de la Vinotinto. Un jugador desconocido para muchos aficionados de la Liga Futve por su efímero paso por Deportivo La Guaira (15 partidos), pero para los que siguen las categorías menores de la selección nacional sí era una promesa que ilusionaba para el futuro. El “Novillo” hizo la escalera desde sub-15 hasta la sub-23 en categorías formativas. Su buen desempeño en la MLS con el New York Red Bulls le valió para ganarse la confianza del lusitano y en cuatro encuentros nadie duda de su titularidad.

 

Su gran despliegue defensivo y buenos recorridos han cautivado la atención de los hinchas y de la prensa, pero todavía no se ha visto su mejor faceta: la ofensiva. En su etapa de inferiores destacó como enganche y con el paso del tiempo fue reconvertido en un volante box-to-box (área a área). Para indagar más sobre su transición del ataque a la defensa, los estrategas Luigi Celli y Francisco Velásquez, ambos bien recordados por el “Novillo”, hablaron con Balonazos para recordar esos ciclos y contar una que otra anécdota del primer gran acierto de Peseiro.

 

 

Luigi Celli, Santo Tomás de Villanueva y Atlético Venezuela

 

La primera vez que el estratega Luigi Celli tuvo en uno de sus equipos a Cristián Cásseres Jr fue en el Santo Tomás de Villanueva, donde fue coordinador por dos años. Ahí Luis “Kike” Faríñez, padre de Wuilker era entrenador y llevó a la escuela al “Novillo” con solo 11 años. “A esa edad se le veía que era un fenómeno, que tenía unas condiciones impresionantes a esa edad”, soltó Celli sobre el volante del NY Red Bulls.

 

Luego el entrenador fue a las inferiores del Atlético Venezuela, con la creación de las categorías sub-12, sub-14 y sub-16. En el primer equipo se encontraba Cristian Cásseres (padre), que mantiene una amistad con Celli al haber jugado juntos en selecciones distritales y que permitió la llegada del volante al cuadro nacional. Con el Atlético jugó dos años en la categoría sub-14, donde “destacó muchísimo”, fue capitán y protagonista en la primera vez que el cuadro capitalino accedió a una segunda ronda.

 

En esta etapa Celli y Casseres padre tuvieron varias conversaciones, donde el progenitor le expresaba al DT que quería ver a su hijo como delantero, pero el timonel lo usaba como volante “8”, e incluso en una eliminatoria lo usó de “5”, en esa ocasión la incomodidad fue mayor. La respuesta de Celli fue: “Te acordaras de mí que él va a triunfar como volante de contención tanto en el extranjero como la selección de mayores”. Los argumentos del entrenador fueron la técnica, las condiciones físicas, los recorridos largos y el juego intenso del “Novillo”. “Me pude haber equivocado y puedo ser el mejor ‘9’ de Venezuela, pero lo veía en otra posición por su control de pelota e intensidad en los duelos”, soltó el coach, que vive en España y dirige un equipo en Galagapar (Madrid).

 

Para Celli, que ha tenido pasos por Panamá y México, indicó que lo más resaltaba de Cásseres a su corta edad era la “inteligencia” al jugar. “Escogía en el momento preciso la jugada perfecta para ese instante, tanto de delantero como volante (…) su juego no ha cambia mucho, el tiempo le agrego madurez y otro timing, pero es el mismo niñito que corría detrás de la pelota, que se divierte jugando y se le ve en la cara”, reflexionó.

 

Desde pequeño se entrenaba a tope y era el primero en llegar a la práctica, donde se ponía a practicar tiros libres, acción que continuaba luego de culminar la sesión. “Un chamo humilde, buen compañero y un poco bromista, pero no en mal sentido. Un líder total, capaz de cargarse el equipo al hombro. Cuando estaba en la cancha se notaba la diferencia”, concluyó Celli, que también tuvo un paso por Metropolitanos y Estudiantes de Caracas.

 

 

Francisco Velásquez, Atlético Venezuela, Deportivo La Guaira y Vinotinto sub-15

 

En Atlético Venezuela fue la primera vez que Francisco Velásquez vio a Cristian Cásseres Jr, cuando el estratega estaba con la sub-18 y el “Novillo” con la sub-14. Con apenas 12 años, cerca de cumplir 13, lo citó a entrenar con la sub-18 en una Semana Santa. “Una de las observaciones que le hice es que era flojo para marcar, porque él jugaba de enganche. El típico enganche venezolano hacía muchos goles, pero no marcaba. La temporada pasada fue premiado como el mejor jugador defensivo de New York Red Bulls, pero pocos saben que en sus inicios le costaba marcar”, expuso el entrenador.

 

Las razones que lo motivaron para subirlo tantas categorías fue la muy buena técnica, pegada, pase y personalidad que tenía Cásseres Jr a tan corta edad. “Se veía que estaba por encima de la categoría en cuanto a: visión de juego, pegada y maña. Tenía mucha maña, porque siempre ha jugado con gente mayor que él desde Nuevo Horizonte”, añadió. Al culminar la temporada Velásquez se marcha al Deportivo La Guaira y convence al volante de incorporarse a la sub-16 naranja, donde también estaban Gaby Miranda Jr y Danny Pérez.

 

Con La Guaira jugó como volante interior por la banda izquierda, más hacia adentro, en un 4-4-2 primero, pero después Velásquez usó un 4-3-3 y se vio en la misma posición que lo hace ahora en la selección absoluta. “Era un enganche con obligaciones defensivas para hacerlo crecer en ese aspecto. Para ir al exterior tenía que ser un jugador completo. Él tenía por instinto la capacidad de pisar el área, de tener ese último pase, de tener esa pegada de media distancia, pero había que agregarle esa capacidad defensiva para que fuera un tipo de dos áreas”, analizó el actual director deportivo de Dynamo Puerto.

 

El ex DT de Deportivo Anzoátegui y UCV fue el primer asistente técnico de Alessandro Corridore para el Sudamericano sub-15 de Colombia 2015. En ese equipo llegó como enganche y fue reconvertido a un doble pivot con Rommel Ibarra, encargado más de labores defensivas, y Cásseres Jr con la función de dar salida y pisar área. “Alessandro (Corridore) y yo conversamos mucho sobre que a los jugadores talentosos le piden muy poco a nivel defensivo, pero cuando vamos al exterior no nos podemos dar ese lujo de no ser un bloque. Venezuela siempre debe defender en bloque”, recordó Velásquez.

 

 

Esa falta de rigor defensivo le costó un jalón de orejas en un módulo en Zulia, en donde en un amistoso anotó un golazo, pero fue sustituido por no marcar. “Alessandro (Corridore) le pegó un regaño impresionante. En el camerino le dijo que aquí era diferente, que tenía que correr, que marcar y ser más responsable. Cásseres siempre fue muy aplicado y no había que decirle las cosas dos veces. Desde ese día hizo clic”, comentó el entrenador.

 

Una de las anécdotas que más marcaron a Velásquez fue el crecimiento en la personalidad de Cásseres, porque recordaba que al principio del ciclo sub-15 no pudo hablar frente al grupo por pena en una dinámica, que en vez de palabras solo profeso risas. Más adelante se lo encontró en los Juegos Nacionales, muy molesto y Velásquez le recomendó que hablara, porque el que quedaba mal era él como jugador de selección nacional si Miranda quedaba eliminada. Siguió la recomendación y reunió a sus compañeros en el camerino e hizo una arenga. En el momento que fue a entrar el estratega de Miranda, en plena charla, Cásseres le pidió al DT que esperara un momento afuera y le diera un espacio en ese instante de intimidad con el grupo. “Fue la evolución de un niño tímido a uno que lidera un grupo”, afirmó Velásquez.

 

Lo visto en lo que va de Premundial por parte de Cásseres Jr no le “sorprende nada” y redobló la apuesta: “Lo que se ha visto no llega ni a la mitad de lo que va a dar. La gente cree que es un volante netamente defensivo y trabajador, pero eso es algo que adquirió, su principal virtud es ofensiva. Hoy se está afianzando en la MLS, pero ojo cuando se suelte. Es un tipo muy parecido a Yangel (Herrera), que salía goleador de los Juegos Nacionales con Monagas. Cásseres era goleador de sus equipos”, cerró el estratega, que tuvo la oportunidad de hacer pasantías en las categorías menores de Barcelona y Real Madrid, además de compartir con Javier Aguirre, el año pasado, en el Leganés.